Si el día anterior la lluvia había hecho de las suyas antes del comienzo del festival, el sábado no hubo la misma suerte. En esta segunda jornada del Coca-Cola Music Experience (CCME), la lluvia fue una de las protagonistas principales hasta más de la mitad de la tarde, cuando poco a poco se fue yendo y dejó que los fans disfrutaran del final del festival sin chubasqueros ni paraguas.
Aun así, en momentos en los que la lluvia caía con más fuerza, el público se venía arriba viendo cómo los artistas se mojaban con ellos y no dejaban de darlo todo. Fue el caso de Alfred Garcia, al que le coincidió uno de los peores momentos de lluvia.
Pero como el día anterior, la lluvia no fue excusa para que todos los asistentes disfrutaran del buen ambiente y la energía que rodeaba el recinto del festival. Donde muchos ya esperan que el año que viene se vuelva a repetir el CCME.
Ante la lluvia, música
Parecía imposible, pero hubo momentos en los que gracias a la música y a los artistas tan entregados, el público se olvidó de la lluvia. Fue este el caso de Bombai y de Lérica, estos dos grupos son sinónimos de buen rollo y de fiesta y es lo que demostraron encima del escenario. Daba igual que lloviese que consiguieron hacer disfrutar y saltar a más de uno.
Como ya comentábamos antes, la actuación de Alfred García estuvo marcada por la lluvia que contrarrestaba al fuego que salía del volcán de su piano. Aun así, dio igual porque el cantante consiguió tener al público rendido a sus pies y cantando junto a él. Además, tuvo un guiño muy emotivo al dedicar ‘Londres’ a su público recordando como compuso la canción en su paso por la Academia de Operación Triunfo.

Otro compañero de Alfred que no se quiso perder este festival fue Agoney, que desde que puso un pie en el escenario dejó de llover. El canario volvió a demostrar que tiene una voz con la que puede hacer y deshacer a su antojo, da igual lo que se le eche que este chico todo lo hace bien. Presentó su nuevo single ‘Black’ junto al coro gospel de Madrid y no dejó a nadie indiferente. Los fans internacionales que vinieron por los cabeza de carteles, se quedaron embobados escuchando al cantante y decían que iban a empezar a seguirle el rastro.

Después de la tormenta siempre llega la calma…
…O no. Tras la lluvia llegó Luc Loren que consiguió que todo el mundo se olvidase que había siquiera caído dos gotas. Todos los espectadores saltaban y gritaban al ritmo del catalán y nadie pudo no dejarse llevar por la ‘monez’ del DJ.

Un final apoteósico
Si todo el festival estaba siendo una locura, el último bloque de cantantes ya superó los límites. Todo comenzó con Luis Tomlinson, ex componente de One Direction, que nada más aparecer ya consiguió que muchísimas personas se emocionasen y rompiesen a llorar al verlo. Comenzó su turno cantando ‘Steal my girl’ de 1D arrancando una nostalgia a todas sus fans. Se le veía emocionado al británico encima del escenario y se lo transmitió a todo el público presente que disfrutó de sus canciones.

La siguiente fue Natalia Lacunza que presentó su primer trabajo de estudio en el festival y que cautivó a todo el mundo cuando salió a cantar con Guitarricadelafuente su ya famosa ‘Nana triste’. Pero sobre todo, Natalia se lució cuando cantó con todo el público ‘Tarántula’.

Lola Índigo llegó al escenario del CCME revolucionando el ambiente, ya había salido antes a cantar con Cupido pero era el momento de verla sola y realmente esta chica es un torbellino que no deja a nadie indiferente. Sin ninguna duda, fue uno de los espectáculos más grandes de todo el festival y todo un acierto de la organización llamarla para que fuese. Lola Índigo es fuerza, es pasión, es música y baile, crea un vinculo con el espectador que le hipnotiza y no deja de mirar al escenario para ver qué sorpresa es la siguiente. Desde luego, lo que se creó en el festival cuando esta artistaza salió con todos los bailarines puede ser comparable a un número de la ‘SuperBowl’ americana.

Y por último y no menos importante, Morat, que cerraron su gira española en el festival de la mejor forma que saben, contagiando su música y su buen rollo a los asistentes. Los colombianos pusieron la guinda al pastel a este festival de dos días que nos ha dejado una sabor agridulce por el agua y que nos deja con ganas de ver con qué nos sorprenderán el año que viene.

Desde Beat It! ya estamos haciendo la cuenta atrás para el próximo CCME, ¿y vosotros?
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